Provincia de Salamanca

LA VÍA DE
LA PLATA

Romano

Conocemos como Vía de la Plata al camino que los romanos trazaron para desplazarse de norte a sur por el interior de la Península Ibérica. Aprovecharon para diseñar esta impresionante vía de comunicación una ruta natural frecuentada ya en la Prehistoria.

Esta ruta atraviesa la Comunidad Autónoma de Castilla y León de norte a sur, con un recorrido de 463 km, 313 millas romanas. Por el sur penetra en la provincia de Salamanca desde Peñacaballera, para desde allí cruzar esta provincia y la de Zamora. Una vez en la provincia de León, pasa por unas pocas localidades para finalizar en Astorga.

Conocemos por los textos latinos que había asociadas a las calzadas diversas instalaciones para facilitar y controlar el transporte de mercancías. No hay constancia arqueológica en Castilla y León de tales establecimientos a excepción de la fortificación conocida como El Castillo. Situada en las cercanías de la localidad de Calzada de Béjar, es posiblemente un fortín romano que desde una posición elevada controlaba el tránsito de viajeros y mercancías por la Vía de la Plata.

Existía ya una vía natural por la que los pueblos prerromanos se desplazaban y que los romanos adecuaron, construyendo puentes que salvaban los arroyos y ríos, y acondicionando todo el itinerario para el trasporte de mercancías en carros.

Las infraestructuras viales romanas estaban diseñadas para garantizar el rápido traslado de las mercancías entre los confines del imperio y para ello era fundamental el transporte de los productos en carros. Por otro lado, el empleo del carro aumentaba considerablemente el volumen de los bienes trasportados, hasta entonces acarreados a lomos de animales.

 En los miliarios dejaron constancia que las obras de construcción y mantenimiento procedían del auspicio imperial. Estos monolitos, generalmente de granito, se colocaban en los márgenes de la vía para marcar las millas recorridas y, en su mayoría, se inscribían textos alusivos al emperador que había encargado los trabajos. En la Vía de la plata son abundantes los miliarios fechados en época de Trajano y Adriano, emperadores que, por la dispersión de los miliarios a lo largo de la Vía, acometerían importantes obras de mantenimiento de su conjunto. Otros cuantos miliarios aluden al emperador Nerón, en un número mucho menos que los emperadores aludidos pero muy por encima de los registrados de otros muchos emperadores -Caracalla, Adriano, constancio, Maximiano, etc.- que al igual que los mencionados anteriormente quisieron perpetuar sus iniciativas en la reparación de esta trascendental vía.

Las evidencias de la Vía de la Plata en la comunidad de Castilla y León son numerosas y es posible recorrer el firme romano en varios tramos. No obstante, es en la provincia de Salamanca en la que apreciamos el mayor número de elementos asociados al camino de origen romano. Por ejemplo, hay un total de 28 miliarios dispuestos en la propia Vía a pesar de de los cientos de años trascurridos. Los podemos contemplar, entre otros, en el tramo de calzada de Puerto de Bejar a Bejar, en Navalmoral de Bejar, Palacios de Salvatierra, o Dueñas de Abajo.

Además, hay varios tramos de la vía transitables a pie , en algunos casos con firme original. Así ocurre en Puerto de Béjar, en el Puente de la Malena de Béjar, en Palacios de Salvatierra o en las inmediaciones de Salamanca en el paraje conocido como el Zurguén, explicado con detalle más adelante.

En estos parajes hay instaladas Aulas Arqueológicas al Aire Libre en las que se expone, mediante paneles divulgativos, el origen, historia y otros muchos aspectos de la Vía de la Plata. Esta información se proporciona, igualmente, en el centro de Interpretación del Monasterio de San Vicente en el cerro del mismo nombre de la ciudad salmantina.

Conocemos por los textos latinos que había asociadas a la calzadas diversas instalaciones para facilitar y controlar el transporte de mercancías. No hay constancia arqueológica en Castilla y León de tales establecimientos a excepción de la fortificación conocida como El Castillo. Situada en las cercanías de la localidad de Calzada de Bejar, es posiblemente un fortín romano que desde una posición elevada controlaba el tránsito de viajeros y mercancías por la Vía de la Plata.

Conocemos por los textos latinos que había asociadas a las calzadas diversas instalaciones para facilitar y controlar el transporte de mercancías. No hay constancia arqueológica en Castilla y León de tales establecimientos a excepción de la fortificación conocida como El Castillo. Situada en las cercanías de la localidad de Calzada de Béjar, es posiblemente un fortín romano que desde una posición elevada controlaba el tránsito de viajeros y mercancías por la Vía de la Plata.

El recorrido por las dehesas salmantinas nos conduce a Salamanca, antigua Salmanticae. La vía cruzaba el río Tormes por el «puente Romano».

Al norte de la ciudad el trazado de la vía se solapa con la cañada ganadera de La Vizana y la Autovía de la Plata. Los restos son escasos , salvo algunos miliarios, como los recogidos en la localidad de Calzada de Valdeunciel. En esta población contemplamos varios ejemplares fragmentados que nos recuerdan su pasado romano . En Calzada de Valdeunciel también hallamos la llamada Fuente Buena, de estilo clásico y en la que para su construcción reutiliza una estela funeraria romana.

AULA AL AIRE LIBRE DEL ZURGUÉN

Junto a la carretera de Aldeatejada a Salamanca, sobre una terraza fluvial, se conserva en perfecto estado de conservación el trazado de la Calzada Romana de la Plata que conducía a la ciudad de Salamanca.

El itinerario musealizado parte de la localidad de Aldeatejada y concluye en el puente romano de Salamanca. Es un camino acondicionado de unos 4 km de longitud que se transita a pie o por el carril bici que discurre en paralelo. A la salida de la localidad de Aldeatejada nos encontramos con el Aula al aire libre del arroyo del Zurguén que mediante diversas señales divulgativas nos ofrece un paseo por la historia y nos describe la ruta.

Ya en el municipio de Salamanca, en un mirador contemplamos el lomo de la calzada con la silueta al fondo de la ciudad. El itinerario continúa bajo el túnel del viaducto hasta llegar a un tramo reconocible del camino romano musealizado bajo el siguiente viaducto.

Un poco más adelante, en un segundo mirador, una fuente restaurada y un hito dedicado a la trashumancia dan cuenta de esta actividad desplegada por el Concejo Real de la Mesta sobre la antigua vía reconvertida en cañada de ovejas merinas. La senda trascurre más adelante sobre el propio lomo de la calzada y, una vez atravesado el túnel bajo la vía del tren, la calzada está perdida.

No obstante, integrados a lo largo de su posible traza vemos la recreación y explicación de varios elementos relativos al devenir histórico del camino: un dique y una noria, la iglesia románica de la Trinidad y el Caserío del Arrabal.

 

La vía romana de la Plata penetraba en la ciudad por el puente romano. Este tiene 26 arcos, de los que 15 son de origen antiguo. Su construcción data del siglo I, posiblemente de tiempos de Trajano. La parte romana se distingue fácilmente compuesta de arcos de medio punto con grandes dovelas almohadilladas y su fábrica es de sillería de granito. El resto del puente fue reconstruido durante el reinado de Felipe IV, en 1677.

Al final del puente, ya en el lado de la urbe, encontramos el Toro de la Puente, un verraco prerromano conservado sobre su pedestal y cuya testuz se ha perdido. La Calzada del Zurguén está incoada como B.I.C. con la categoría de Conjunto Histórico.