Con Alfonso VIII, la frontera se desplaza y Fuenteungrillo queda alejado de la zona limítrofe, hecho que parece ser determinante en el notable aumento de la población. En el siglo XIII tiene tres núcleos de población, de los que el principal cuenta con dos iglesias.

En lo que respecta a su abandono, los documentos escritos aluden a un núcleo despoblado en el siglo XIV. El paso de ser un caserío estable y de cierta envergadura a un despoblado en tan solo un siglo se debe al parecer a la suma de varias causas. Pudo influir la peste que asoló el reino en el siglo XIV diezmando la población. A ello se añade los problemas derivados del sometimiento de los habitantes a los señores feudales. En su origen Fuenteungrillo pertenece a los Téllez de Meneses, pero a partir de 1185 el monasterio de Santa María de Matallana comienza a incluir bajo su dominio territorios cada vez alejados del monasterio. En el siglo XIII se constata que Fuenteungrillo es ya propiedad del cenobio.

Desde esa época la fuga de la población de Fuenteungrillo es constante. Hay un documento de la primera mitad del siglo XV en el que de Doña Inés de Guzmán, duquesa de Villalba de los Alcores, manda derribar las casas y los palacios de Fuenteungrillo.

En el despoblado son visibles tras la excavación arqueológica los cimientos del castillo construido en el siglo XIII. El edificio tenía una longitud de 30 metros de lado y, aunque la altura conservada es mínima, podemos suponer que podría llegar hasta los 12 metros de alzado. La construcción fue expoliada de antiguo para la utilización de las piedras en construcciones del entorno.

En el interior hay silos excavados en el suelo y al este se aprecia un recinto contiguo al castillo en el que se distinguen diversos espacios destinados al almacenamiento de víveres, zona de caballerizas, un palomar y una bodega.

Desde el castillo se extendía una cerca que rodeaba el caserío que es mencionada en las fuentes escritas ya desde el siglo XIII, aludiendo a puertas como la de San Pedro. En cuanto a las viviendas medievales, hay varias excavadas y el visitante puede ver una de estas casas reconstruida y ambientada con los enseres propios del momento.

Además, el yacimiento cuenta con un Aula Arqueológica. Es un edificio ex novo que cuenta con una proyección de realidad virtual en la que el visitante conoce la historia de Fuenteungrillo, con especial mención a los enfrentamientos de los reinos de Castilla y de León, constantes en esta zona.

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