Durante el periodo prerromano conocemos que la población indígena de Segisama perteneciente al pueblo de los Turmogos se ubicó en el castro de Castarreño y que, según han demostrado las excavaciones arqueológicas, la ciudad, una de las más importantes del citado grupo indígena, estuvo habitada desde el siglo IV a. C hasta la ocupación romana.

La urbe indígena es mencionada en las fuentes clásicas. Relatan Floro y Osorio que en las cercanías de la ciudad de Segisama se asentó el campamento de Augusto en su ofensiva contra los cántabros(29-19 a.C.), campamento que se reconoce en unas recientes prospecciones aéreas en las cercanías de la población actual.

Finalizada exitosamente la campaña,  el campamento militar, se transformó en la ciudad romana de Segisama Iulia, nombre que acuño en honor de la dinastía a la que pertenecía Augusto. Se han reconocido en varios parajes arqueológicos que ocupan una parte del término municipal de Sasamón trazados de calles y edificios romanos, detectados y cartografiados mediante prospección aérea y terrestre. Igualmente se han observado restos de, una de las más importantes vías romanas de la Península, la calzada que comunicaba Astorga con Zaragoza y Tarragona, que permitía la salida hacia Roma de los productos explotados en el noroeste, entre los que sobresalía el oro de las minas de las Médulas.

La colegiata de Santa María la Real, acoge algunos de los restos romanos hallados en la villa y su entorno en el Centro de Interpretación del Medievum. En él se recrea la historia de Sasamón, deteniéndose particularmente en las épocas romana y medieval. En didácticos paneles se repasa la vida en el campamento romano, los modos de vida en la ciudad romana, la construcción de una iglesia durante la Edad Media, los tipos de enterramientos medievales que evocan los hallados en la Colegiata y hay recursos divulgativos que nos hablan de temas tan sugerentes como la medicina y la música en el medievo. El centro del espacio expositivo lo ocupa un magnífico mosaico, conocido como el mosaico de Arquillo, por ser este el nombre del pago en el que se descubrió en el trascurso de unas obras. En el mosaico, fechado según sus investigadores a finales del siglo II o principios del siglo III, hay variadas figuras geométricas, principalmente octógonos, en lo que se insertan pájaros, animales fantásticos, entre los que descubrimos un ciervo, una pantera, un grifo y un caballo, rematados todos ellos en su tracto trasero con cola de pescado. En el centro de mosaico hay un busto que se identifica con un tritón en el que distinguimos en su tocado dos pinzas de cangrejo.

El Centro de Interpretación del Medievum forma parte de la ruta de las Cuatro Villas de Amaya en la que se incluyen las villas de Castrojeriz, Melgar de Fernamental, Sasamón y Villadiego. Estas poblaciones burgalesas conservan un legado patrimonial sobresaliente. Tres de ellas cuentan con núcleos urbanos que han sido declarados ConjuntoHistórico y atesoranmonumentos de gran interés. Tiene además otros recursos de crecienteinstalación, entre ellos, heterogéneos centros de interpretación. Aparte del referido en Sasamón, en Villadiego encontramos Fabulantis dedicado al cómic; en Castrojeriz, localidad en pleno Camino Francés, está emplazado el centro de interpretación Iacobeus que nos orienta sobre la historia del Camino de Santiago y finalmente En Melgar de Fernamental, territorio por el que trascurre el Canal de Castilla, se sugiere visitar, además, Pisórica, Centro de Interpretación que aborda el hábitat fluvial y la pesca.

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