Astorga | León

ASTORGA
ROMANA

Romano

Antes que una ciudad, Astorga fue un campamento militar romano. La arqueología urbana ha permitido descubrir una parte del recinto defensivo de ese acuartelamiento primitivo, concretamente dos líneas de fosos paralelos que la Legio X Gemina excavó para protegerse en el cerro donde más tarde se ubicó Asturica Augusta.

Su cercanía a importantes recursos mineros favorece que este enclave militar a los pocos años se convierta en un importante centro civil y administrativo que controla y gestiona un vasto territorio. En Astorga se establece la residencia del legado jurídico y del procurador para Asturia y Gallaecia, cargos vinculados directamente con las actividades de extracción y envío del oro del noroeste de la Península Ibérica que se centralizaban en la ciudad. Asturica era el paso obligado del oro hacia Tarraco, donde embarcaba a Roma.

Los restos arqueológicos de todo tipo, incluidos los epigráficos, recuperados en las actuaciones arqueológicas, ofrecen una más que interesante información sobre la importancia y diversidad de la sociedad de Asturica entre los siglos I y III d. C.

Tras el ocaso del imperio romano la ciudad disminuye notablemente en población, pero aún se mantiene habitada. Contamos con numerosos hallazgos de restos materiales pertenecientes al hábitat y edificios religiosos de la Alta Edad Media, como, por ejemplo, el reciente descubrimiento de una jarrita califal del siglo X, hoy expuesta en el Museo de León, y los restos de un edificio religioso prerrománico.

El núcleo urbano coge impulso con las peregrinaciones a Compostela, en los siglos XII y XIII, recuperando su papel como encrucijada de caminos. Asistimos así a la construcción de una nueva ciudad añadida a la antigua, edificándose nuevas viviendas, iglesias, monasterios y hospitales, de modo que el urbanismo medieval se superpuso al antiguo de época romana y pierde la traza ortogonal. La edificación de la catedral a finales del XV vuelve a modificar buena parte de la trama del centro urbano.

Desde los años 80 se acometen excavaciones arqueológicas sistemáticas en Astorga y desde esa fecha han concluido casi dos centenares las intervenciones en solares urbanos. Esto ha permitido avanzar notablemente en la necesaria investigación histórica de la antigua Asturica romana y medieval y, a su vez, fundamentar propuestas de conservación e integración de algunos elementos inmuebles descubiertos. A día de hoy el itinerario arqueológico por la localidad es uno de los más interesantes y atractivos del interior peninsular.

UN POCO DE HISTORIA

Para contextualizar el pasado romano haremos un breve y rápido repaso por los hitos más significativos de la historia de Asturica:

      • En el año 15 a C. ya se había instalado allí la Legio X Gemina
      • En el año 14 a C. el propio emperador Augusto visita Asturica
      • En 24 d. C., a finales del reinado de Tiberio y hasta la época de Claudio, se produce la transformación del campamento militar en un núcleo civil. Podemos afirmar que es el auténtico nacimiento de ASTURICA AUGUSTA. Es la fecha de construcción del saneamiento urbano, el levantamiento de la muralla imperial, el foro y los grandes edificios termales.
      • En el año 73 d. C. Astorga recibe el IusLatii (derecho latino a los hispanos libres) de Vespasiano y es adscrita a la tribu Quirina. Plinio el Viejo visita la ciudad definiéndola como Urbs Magnifica.
      • A finales del siglo II, durante el periodo de Septimo Severo, 193–211 d.C., Asturica asume la capitalidad de la provincia Hispania Nova Citerior Antoniniana.
      • 289 d.C. Se unifican todas las provincias en una nueva unidad superior: la Diócesis de Hispania, origen de la división eclesiástica posterior. Asturica quedaría dentro de la provincia de la Gallaecia y, aunque pierde su categoría administrativa, cobra impulso suficiente para afrontar y acometer las obras del imponente recinto defensivo tardorromano.

LUGARES ARQUEOLÓGICOS PARA VISITAR

Desde hace unos años Astorga dispone de un sugestivo itinerario arqueológico que engloba la visita de diferentes vestigios arqueológicos integrados en la ciudad, unos de acceso libre y otros visitables a través del Museo Romano de Astorga. 

Para aquellos turistas. interesados existe una aplicación de móvil imprescindible para comprender el pasado romano mientras camina por la ciudad, si tu horario no coincide con el de la Ruta romana, y cuyos dibujos son un gran trabajo de interpretación.

Acceso libre

Murallas

Las primeras murallas astorganas de época altoimperial dieron paso a otra muralla más extensa y aún conservada casi en su integridad. Su construcción coincide con la época de reorganización administrativa del Imperio, el siglo IV. Con el cese de las explotaciones mineras Astorga asume el papel de plaza fuerte responsable de la vigilancia de las vías romanas, garantizando el tránsito de productos agrícolas destinados a los ejércitos del norte. La Puerta Romana, contigua a la catedral, es el resto mejor conservado de esta muralla tardorromana.

El recinto amurallado fue reedificado por el obispo Nuño hacia 1242 y sufrió diversas reparaciones durante la Edad Media que nos han legado su alzado e imagen actual y la noticia de sus puertas y postigos desaparecidos (puertas de Rey, del Sol, del Obispo, de Hierro). Su perímetro de forma trapezoidal sobre pasa los 2.100 metros y dispone de casi una treintena de cubos semicirculares con una media de siete metros de diámetro. Su soberbia imagen, unida al conjunto que forman la catedral y el palacio Episcopal, componen una de las estampas más conocidas de Astorga.

Domus romana

La domus romana es el primer vestigio musealizado como consecuencia de la ejecución sistemática de excavaciones arqueológicas modernas. La parte expuesta gira en torno a un gran patio con columnas denominado peristilo. Fue construida a finales del siglo I d.C. y estuvo ocupada hasta la primera mitad del IV.

Sin duda debió pertenecer a una familia relevante de la ciudad. Las remodelaciones y ampliaciones llegan a ocupar un espacio público, una cloaca. 

Sus habitaciones se solaron con diferentes tipos de tratamiento y materiales, en virtud de su importancia. Así, emplearon suelos de mortero de cal con fragmentos de ladrillos -opus signinum-en las estancias destinadas a servicio y dormitorios; pavimentos de ladrillo dispuesto de canto en forma de espina de pez.-opus spicatum- para comedores y despachos y un excepcional mosaico para el Oecus o salón de recepción.Las habitaciones estaban decoradas con pintura mural con motivos vegetales. 

Paralelo al eje de la calle, la vivienda dispuso de un pequeño complejo termal de uso privado calentado con hipocaustum

Mosaico del Oso y los pájaros

El salón de recepción, el Oecus de la casa romana, se edifica  entre finales del siglo II y comienzos del III y en él se encuentra el conocido como  mosaico del oso y los pájaros. (poner al lado del mosaico)

En las  escenas periféricas se representa una  alegoría del otoño con ramas de vid y los racimos picados por los pájaros, mientras que el motivo radial del interior dispuso de ocho medallones en los que hay  animales específicos  del mito de Orfeo, las fieras que apacienta con el tañido de la lira que recibió directamente de Apolo, entre ellos un oso.

La iglesia de Santa Marta

Junto a la catedral y cerca del Palacio Episcopal se ha excavado una pequeña iglesia altomedieval. Su aula rectangular y una pequeña cabecera cuadrada dan testimonio de su antigüedad. Un incendio redujo a cenizas el templo. Los restos se taparon para evitar su deterioro, pero es posible distinguir su planta, ya que su traza está dibujada en el pavimento del espacio público.

Entrada concertada

Cerca legionaria

Cuando Roma asume el control de las explotaciones auríferas cercanas y su traslado hasta la metrópoli, erige un primer asentamiento castrense en Astorga del que conocemos dos fosos de sección en V. Están excavados en la grava natural del escarpe del cerro para incrementar su efectividad defensiva.

Hacia el primer tercio del siglo I d.C. el foso interior esta inutilizado y se inicia sobre él la construcción de una muralla de piedra que protegería largo tiempo la ciudad romana. Este muro se completaba con torres circulares, una de las cuales aparece cimentada en el foso que pronto se vio invadido también por los primeros edificios y las redes sanitarias. 

Más tarde, en época Flavia, segunda mitad del siglo I d.C., esta primera fortificación fue abandonada y la ciudad extendió su superficie abrazada por otra defensa de piedra.

Termas Menores

Los baños públicos romanos eran espacios dedicados al aseo personal y sobre todo a las relaciones sociales entre las clases pudientes romanas .

La estructura de los edificios termales responde a un recorrido lineal en el que las sucesivas estancias manifiestan diversas funcionalidades. Tras dejar la ropa en el vestuario -apodyterium-, nos encontramos con la habitación de agua fría -frigidarium-, la templada -tepidarium- y finalmente la caliente o caldarium, seguida de una sauna, sudatio o laconicum según tuviera o no vapor.

Las habitaciones estaban calefactadas mediante hipocaustos o cámaras de aire subterráneas, alimentadas por uno o varios hornos de ladrillo refractario con un espacio para arrojar el combustible –praefurnium-. El calor, al modo de las glorias tradicionales, circulaba bajo las habitaciones.

La construcción del edificio de las Termas Menores de Asturica se acomete a mediados del siglo I d.C., si bien fueron remodeladas a finales del II, y se abandonan. a mediados del siglo III.  En uno de los canales de desagüe de las termas aparecieron diversas joyas, evidencia del uso preferente de estos baños por parte de las clases acomodadas de la ciudad.

Aedes Augusti

En el centro del lado occidental del foro de Astorga se construye una estancia o aula precedida por una entrada con columnas y rematada por un ábside. Esa disposición, así como el rico pavimento de placas de mármol con motivos geométricos bícromos, permite identificarlo con un templo dedicado a la memoria del emperador Augusto. El remate absidado se reservaría a una desaparecida ara dedicada al culto Imperial en la que el augur ofrecería sacrificios de pequeños animales, normalmente aves.

Foro romano

En el lugar más elevado de la ciudad se levantó el centro neurálgico de la administración romana, el foro de Astorga. Un vasto espacio en torno al cual se ordenaban los edificios públicos. El enorme complejo de planta cuadrangular y cerca de 30.000 m2 estaba delimitado por un pórtico monumental que remataba en exedras y en su zona central se levantaron edificios de culto oficial. 

En Astorga el espacio ocupado por el foro romano ha pervivido en la actual plaza Mayor, salvando las diferencias de tamaño, mucho mayor por cierto el foro romano.

Ergástula

En el antiguo foro romano, frente al templo dedicado al emperador Augusto –Aedes Augusti– , se ubica uno de los edificios mejor conservados de la Astorga romana. Conocido como la Ergástula es una gran galería abovedada que delimita uno de los laterales del complejo monumental del foro.

 En la actualidad, la parte conservada constituye un espectacular pasaje cuyas paredes y bóveda estaban fabricados en opus caementicium, el hormigón romano encofrado en madera. Su construcción debe remontarse al año 30 d.C.

Tras numerosos usos modernos —como parte de viviendas o comercios particulares, entre otros—, fue adquirida por el Ayuntamiento y destinada a sede del Museo Romano de la ciudad.

Museo romano

Los numerosos solares excavados en Astorga han deparado gran cantidad de objetos de la vida cotidiana, del artesanado y las decoraciones domésticas, expuestos hoy en parte en el Museo Romano. Los fondos del museo Romano abarcan multitud de restos materiales:. pinturas de estilo pompeyano, inscripciones, bronces, monedas, joyas o cerámica hallados bajo las casas de la moderna ciudad. Son fiel reflejo de la vitalidad de la misma en la Antigüedad e ilustran el modo de vida de las gentes que la habitaron en los primeros cinco siglos de la Era.

Ya hemos mencionado que el museo se ubica en la Ergástula. Sobre el edificio antiguo hay otras dos plantas, una dedicada a la exposición permanente y otra con salas de trabajo del departamento de arqueología municipal. 

Cloacas

Las primeras noticias de las cloacas asturicenses datan de los años sesenta del siglo XIX, si bien los principales descubrimientos son de mediados del siglo XX, con el hallazgo y documentación, entre otros, del ramal correspondiente al Jardín de la Sinagoga. Su trazado permite hacerse una idea del urbanismo de Asturica Augusta. Así, gracias a la red de canalizaciones conocemos que la ciudad antigua poseía un diseño urbanístico ortogonal y de amplias calles.

Parece ser que inicialmente los conductos eran adintelados y con capacidad limitada, pero debido al crecimiento de la ciudad, en la segunda mitad del siglo I, fue necesaria una segunda red de mayor caudal. Hacia el 80 d.C. se  levantan las galerías abovedadas que hoy podemos visitar, con alturas de hasta metro ochenta y dotadas en ocasiones de andenes laterales para el paso. Los muros son de mampostería a los que se añadía una bóveda de cañón con piedras dispuestas a modo de burdas dovelas unidas con argamasa. Su piso solía ser de pizarra.

ASTURICA EMERGE

La visita y explicación al público de los numerosos restos arqueológicos de época romana excavados en la ciudad de Astorga se organiza en un itinerario arqueológico, denominado Ruta Romana, gestionado  desde el Museo Romano.

Igualmente, con el objetivo de favorecer. la presencia de estos bienes patrimoniales en el espacio urbano, la Ruta Romana, gracias al proyecto Astúrica Emerge, cuenta con nuevos recursos que permiten recrear la ciudad antigua sobre la ciudad actual. Una serie de ilustraciones ambientales reconstruyen los conjuntos arqueológicos sobre la trama urbana actual. Este trabajo de recreación arquitectónica se basa en el estudio de la documentación estratigráfica, planimétrica y fotográfica derivada de las excavaciones.

Astúrica Emerge dispone también de un vídeo que enlaza los trabajos arqueológicos con las piezas que forman parte de la exposición permanente del Museo Romano y con los espacios visitables de la Ruta Romana.