La comarca de Sayago, fronteriza con Portugal, está situada en el suroeste de la provincia de Zamora; delimitada por dos ríos a modo de frontera natural: el Duero que separa Sayago de las Tierras zamoranas de Alba, del Pan y del Vino; y el Tormes que marca los límites con la vecina provincia de Salamanca, de gran presencia gracias al embalse de La Almendra.
La morfología de la comarca está definida por la gran masa granítica del subsuelo, combinando los agrestes perfiles socavados por el Duero —los Arribes zamoranos— con las formas más suaves de la penillanura, de la que emergen redondeadas peñas de granito —los llamados berruecos o bolones—.
Este relieve determina el paisaje de la zona, mimetizándose lo natural y lo humano gracias al nexo común que establece la roca granítica, recurso material que el sayagués ha empleado para el levantamiento de estructuras vinculadas a su actividad rural.
La presencia y relevancia de esta piedra se hace patente en la interesante arquitectura popular de la comarca, donde es empleada para la realización de las cercas que delimitan los espacios agrarios —las llamadas cortinas—; grandes lajas de piedra se aprovechan para la construcción de fuentes y pontones o se integran en la edificación de arquitecturas sencillas como viviendas, chozos o las propias iglesias que cobijan las pinturas objeto de este estudio.
Para saber más de la arquitectura popular de Sayago visita la web de Patrimonio Cultural de Castilla y León.