Pinturas de los zócalos de la Torre de Hércules
El convento de las MM. Dominicas de Segovia, como tantos otros, se estableció en unos palacios donados por miembros de la aristocracia a las monjas, entre ellos un torreón del siglo XIII, que quedó encerrado e inaccesible en la clausura monástica.Lo más notable de esta torre, llamada de Hércules, son los zócalos pintados en dos de sus estancias, que constituyen uno de los conjuntos de pinturas mudéjares más importantes que se conserva. Entre los motivos representados destaca la ornamentación de lacería, que cubre casi toda la superficie formando multitud de estrellas y figuras de gran belleza. Entre esta decoración geométrica el artista representó también plantas, animales, guerreros y hasta el asedio a un castillo, todo ello empleando únicamente un color rojo intenso aplicado sobre el yeso blanco del revoco. Se atribuye a un artista musulmán tanto por el predominio de motivos mudéjares, como sobre todo por las inscripciones en árabe que repiten la jaculatoria: “De Dios es el Poder. Demos gracias a Dios”.