| | PÉREZ DOMÍNGUEZ, Carlos; RODRÍGUEZ CABALLERO, Juan Carlos
Departamento de Fundamentos del Análisis Económico. Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales. Universidad de Valladolid
 RESUMEN
La cuantificación del desempleo se ha venido efectuando tradicionalmente en términos de stocks, esto es, valorándolo como el número de personas (absoluto o en relación a los activos) que se encuentran buscando empleo sin conseguirlo, en un cierto instante del tiempo.
Ahora bien, el volumen de ese stock o «pool» de desempleados depende, en cada momento, de dos flujos: uno de entrada al desempleo y otro de salida del mismo. El estudio de ambos flujos abre nuevas y enriquecedoras perspectivas en la comprensión del problema del paro.
El resultado más interesante que hemos obtenido radica en comprobar el alto grado de rigidez de las estructuras laborales españolas y castellano-leonesas, situadas entre las menos flexibles de los países occidentales analizados. Asimismo, hemos corroborado la presencia de un muy alto grado de histéresis o incapacidad de recortar las cotas de desempleo alcanzadas en las recesiones durante las fases de recuperación. Este fenómeno se asocia (sin apreciar pautas diferenciales claras entre España y la Comunidad) a la imposibilidad de mantener altas las salidas del desempleo en fases de recuperación o, en otras palabras, a la dificultad que tienen los parados existentes de encontrar un nuevo empleo incluso en los momentos de auge económico.
 5o Congreso (Ávila, 1996), El mercado de trabajo I
Comunicaciones 1, páginas 318-328
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