Presenta una economía deprimida, producto de la situación financiera internacional, pero también por falta de inversión interna, baja recaudación del gobierno, aunada a elevados niveles de evasión fiscal. Las políticas de gobiernos anteriores facilitaron el abandono del agro, disminuyendo la producción interna de los productos de primera necesidad, con lo que se amplió la brecha de la pobreza en el campo y se generó mayor desplazamiento de población rural hacia las ciudades. Aún con estas limitaciones, a través del actual gobierno ha recibido mayor atención la legalización de tierras producto de la reforma agraria, el Programa de Agricultura Familiar (PAF) llega cada vez más a mayor número de productores/as y se crean otros proyectos para incentivar la producción agrícola, pecuaria y piscícola.
La zona propuesta para ejecución del proyecto en los Departamentos de San Miguel y La Unión, son de los/as más afectados/as por las variaciones climáticas, principalmente por sequías. Elevadas temperaturas y alto grado de deforestación, hacen de las tierras que sean poco productivas.
La población en los dos Departamentos es de 742.657 habitantes, siendo el 62% urbana y el 38% rural. La pobreza extrema es de alrededor del 14%, por lo que también se encuentra un porcentaje elevado de familias que reciben remesas del exterior. El analfabetismo en la zona es bastante superior al promedio nacional de 12% y también la tasa promedio de escolaridad que a nivel nacional es de 7 años.
Recurren a los recursos naturales, como la recolección de leña y la producción de artesanías de madera y otros materiales, que ha estado generando una mayor degradación ambiental.
El Salvador tiene una población joven, ya que el 46,9% de ésta corresponde a menores de 20 años; mientras que la población mayor de 60 años, apenas representa el 9.1%. Las mujeres continúan siendo la mayoría dentro de la población total, representando el 52.3%.
Descripción de la intervención:
Este proyecto se orienta al apoyo de cooperativas de base de la reforma agraria salvadoreña en una estrategia de desarrollo rural bajo un enfoque de soberanía alimentaria. Este enfoque es abordado desde una perspectiva de equidad de género e incorpora también un proceso de incidencia para lograr la concertación de las esferas públicas y privadas para contrarrestar los efectos del cambio climático.
La estrategia combina formación y práctica, con métodos participativos, como el de “Campesino a Campesino”, y la asistencia técnica de instituciones creadas por el mismo movimiento cooperativista como es el Centro de Investigación, Experimentación y Transferencia de Tecnología Agroecológica (CIETTA). El proyecto involucra directamente a seis cooperativas de la Federación de Cooperativas de la Reforma Agraria de Oriente (FECORAO). Se establecerán 160 unidades productivas diversificadas, más 6 huertos colectivos con los grupos de mujeres que cuentan con 87 asociadas.
Objetivos:
General: Promover un modelo de Soberanía Alimentaria con enfoque de género que impulse la diversificación productiva con cultivos adaptables y resistentes a los efectos del cambio climático, mejorando las condiciones socioeconómicas de los/as productores/as agropecuarios/as afiliados/as a cooperativas de FECORAO.
Se pretende conseguir:
Aumentar la diversificación agrícola con cultivos resistentes al cambio climático con granos básicos.
Los/as agricultores/as están sensibilizados/as y organizados/as para enfrentar la afectación producida por el cambio climático y con capacidad para la incidencia sobre políticas públicas locales y nacionales.
Fortalecida la organización de las mujeres en FECORAO y de su participación en las actividades productivas, de formación, organización y conducción.
Fortalecido el Centro de Investigación, Experimentación y Transferencia Tecnológica en Agroecología. (CIETTA).
Población beneficiaria directa:
Total: 247 (Mujeres: 159)
Población beneficiaria indirecta:
6 cooperativas campesinas y 6 grupos de mujeres (1235 beneficiarios)