El Palacete y la casa del Bosquero:

El Palacete se levantó en el siglo XVI. Destaca la fachada monumental con las ventanas coronadas con los escudos de las familias Zúñiga y Sotomayor y la inscripción con la fecha de construcción: 1567.

La Casa del Bosquero era la vivienda para el personal que cuidaba del mantenimiento de la finca.

La zona residencial se completa con las caballerizas y la capilla, que data de finales del siglo XIX.

 

El estanque:

Situado en la plataforma principal, es sin duda la parte más singular y característica de El Bosque. Posee planta cuadrangular ligeramente deformada y recoge el agua del arroyo de la Garganta del Oso, desviada desde la sierra a más de tres kilómetros. En medio, sobre una isla artificial, se levanta el templete de estilo neomorisco.

 

La Exedra, la Rotonda y las fuentes:

En el entorno del estanque encontramos otros elementos renacentistas como el lavadero, la Fuente de los Ocho Caños o las plazuelas de la Exedra y la Rotonda, lugares de esparcimiento donde se celebraban conciertos y recitales de poesía y teatro.

 

Fuente de la Sábana:

Remata la calle principal de la fachada por su lado nordeste y es un bello ejemplo de arquitectura barroca de principios del siglo XVIII.

 

Terraza intermedia:

Se accede a ella por una escalinata que desciende frente al cubo del desaguadero de la presa. Su diseño geométrico con setos de boj evoca el aspecto originario y formal que debió de tener toda la parte ajardinada hasta el siglo XIX. En uno de sus extremos, se encuentra el invernadero. Desde ella se accede por un tramo de escaleras al jardín.

 

Jardín Romántico formal:

En el año 1871 se transformó por completo el originario jardín renacentista y se sustituyó por parterres irregulares con coníferas y especies exóticas, como la singular secuoya central, al gusto romántico. Repartidos encontramos restos de fuentes y elementos de esas épocas con elementos de mobiliario más moderno.

 

Huerta de Abajo:

Se trata de un espacio productivo que ocupa la terraza inferior. Se cree que también tuvo un trazado renacentista regular que no se conserva.

 

Alameda:

Siguiendo el eje axial que ordena todo el conjunto y que unía visualmente el estanque con el Palacio Ducal en Béjar, la Huerta de Abajo desemboca en una alameda rodeada de prados que nos lleva hasta la Puerta de la Justa, entrada principal al recinto.