Detalle de la vista de Wyngaerde de1562. Vista aérea actual de la Catedral. Sombra de la torre sobre el antiguo barrio de las Canonjías
Antes de la ruina de la vieja Catedral a causa de la Guerra de las Comunidades, ya se había pensado en su traslado al solar del antiguo Convento de Santa Clara en la parte alta de la ciudad, pero la proximidad con la parroquia de San Miguel creaba algunas reticencias. Un hecho que favoreció el cambio a este nuevo enclave fue el abandono de la judería tras el edicto de expulsión, lo que había permitido que, desde 1492, estas casas fueran compradas y derribadas paulatinamente por el Cabildo. La victoria imperial y el hundimiento fortuito de San Miguel en 1523 hicieron factible el traslado.
Plantas generales de la Catedral: la primera, probablemente, de Juan Gil de Hontañón y de Rodrigo la segunda. (Fotografías de José Manuel Cófreces)
Sección y planta del crucero y planta y alzado de la girola probablemente de Rodrigo Gil de Hontañón. (Fotografía de Francisco García Abril)
Recreación de los arquitectos en la construcción del templo. Sección de la cabecera sobre el perfil del Templo. Vista axonométrica del conjunto de la Catedral
Juan Rodríguez, el fabriquero
El canónigo Juan Rodríguez fue quien, desde su función de fabriquero, condujo a buen término la construcción, jugando incluso un papel destacado al asumir, junto a García de Cubillas, la dirección de las obras tras el despido de Rodrigo.
El fabriquero debió ser un hombre humanista con gran capacidad de aprendizaje. Llevó unos impecables libros de fábrica, trufados de preciosos detalles sobre los gastos en herramientas, contratos con los canteros, etc. Cuando sus conocimientos se veían superados, no dudaba en consultar a expertos. Y así, entre 1532 y 1536, emitieron informes de las obras los arquitectos Juan de Ávila, Alonso de Covarrubias, Felipe Bigarny, Enrique Egas y Francisco de Colonia.
Juan Rodríguez adquiere en el templo, hacia 1551, la Capilla de la Piedad, guarnecida de un soberbio retablo con un Santo Entierro que Juan de Juni talló en 1571. La capilla contará además con una reja del siglo XVI, obra de fray Francisco de Salamanca, proveniente de la antigua Catedral y que el Cabildo le regaló.
Santo Entierro de Juan de Juni en la Capilla de la Piedad
Vista del monasterio de El Parral junto a las canteras y frente de extracción
Las canteras de la Catedral
Gracias a los libros escritos por el fabriquero, disponemos de muchos de los contratos que se firmaron con los canteros, permitiéndonos conocer la procedencia de las piedras que se usaron en la Catedral. Podemos hablar de cuatro canteras. Las primeras piedras empleadas en la construcción provienen de la antigua Catedral, que fue desmontada parcialmente. Se extraen además calizas de los frentes próximos al Parral y Madrona (valle de Tejadilla) y granitos del valle del Cigüiñuela, en el municipio de La Lastrilla.