267.458 euros para las obras de emergencia de las cubiertas del monasterio de Santa Catalina de Siena, Valladolid
-
El Consejo de Gobierno ha aprobado una inversión de 267.458 euros que se destinarán a acometer obras de emergencia en las cubiertas del monasterio vallisoletano de Santa Catalina de Siena. Este recinto religioso, con una vida ininterrumpida de más de 500 años, fue fundado en 1488 y cuenta con la declaración de bien de interés cultural con la categoría de Monumento desde 1979.
Las obras de emergencia se llevarán a cabo debido a que el reciente periodo de lluvias ha incidido de forma muy negativa en el monasterio, principalmente en las cubiertas de la iglesia de la sacristía, la escalera y la zona del obrador, originando daños irreparables en puntos de la armadura y abundantes filtraciones que, en su conjunto, amenazan con desplomes locales y el consiguiente riesgo para el monumento y sus ocupantes. Por este motivo, se van a acometer por vía de emergencia, unas obras que comprenden trabajos de apuntalamiento y protección de las zonas con riesgo de desplome, desmontaje de tejados y armaduras y su sustitución por nuevas estructuras y cubiertas en la zona más afectada.
Fundado en 1488
El monasterio de Santa Catalina de Siena en Valladolid fue fundado en el año 1488 por María Manrique, noble dama castellana y aprobado por el papa Inocencio VIII. El convento, cercano al río Pisuerga, se construyó junto al antiguo barrio judío. El claustro es el originario, mientras que la iglesia fue sustituida, erigiéndose la actual a principios del siglo XVII por el arquitecto clasicista Pedro de Mazuecos. El retablo es también de estilo clasicista y tiene grandes cuadros del pintor Diego Valentín Díaz, contemporáneo de Velázquez y tallas Pedro de la Cuadra. La iglesia contiene además dos sepulcros: el del Licenciado J. Acacio Soriano, obra en alabastro del escultor Matías Roldán; y el del escultor Juan de Juni, enterrado a los pies de un Cristo crucificado, de tamaño natural, obra del propio artista. El coro, tan amplio como la propia Iglesia y destinado al rezo de la comunidad, conserva la arquitectura original. Bajo una gran bóveda gótica, la sillería es de nogal y estilo clasicista.
El interior del convento conserva la arquitectura y sobria decoración original. Destaca por su valor el refectorio, cuyas paredes conservan un hermoso friso de azulejos de Talavera. La sede prioral conserva como elemento decorativo un escudo de Felipe III. En la comunidad se conserva un hermoso Cristo yacente de Gregorio Fernández y cuadros de Diego Valentín Díaz.
Consejo de Gobierno del 9 de octubre de 2008.
Dirección de Comunicación