Construcción de 3 puntos limpios en las provincias de Burgos y Palencia.

LA JUNTA DE CASTILLA Y LEÓN INVIERTE MÁS DE 1 MILLÓN DE EUROS EN LA CONSTRUCCIÓN DE TRES PUNTOS LIMPIOS EN LAS PROVINCIAS DE BURGOS Y PALENCIA

 El Plan Regional de Residuos Urbanos y de Envases de Castilla y León 2005-2010, que contempla una inversión de 258 millones de euros, tiene como uno de sus objetivos prioritarios la recogida selectiva y la implantación de puntos limpios en los municipios con una población superior a los 5.000 habitantes antes de que finalice el ejercicio 2006. Actualmente, la Red de Puntos Limpios de Castilla y León cuenta con 83 instalaciones que han supuesto una inversión de 14,6 millones de euros.

 Durante el periodo de vigencia del plan se prevé materializar una inversión de 14,4 millones de euros para poner en marcha las instalaciones en los municipios de más de 5.000 habitantes, así como para ofrecer mecanismos de colaboración a las administraciones locales que así lo soliciten en municipios de menor dimensión o para la adquisición de puntos limpios móviles.
 
 En el marco de la consecución de los citados objetivos, la Junta de Castilla y León ha aprobado hoy tres nuevas actuaciones con un presupuesto total superior a un millón de euros, financiados al 100% por la Administración regional, y una población beneficiada de 51.457 habitantes.

(Ver Cuadro Anexo)

 Con los puntos limpios que hoy se aprueban sólo restan por poner en marcha 6 para completar la red en los municipios de más de 5.000 habitantes.

 Los proyectos aprobados supondrán la construcción de tres puntos limpios en los municipios indicados para dar servicio al área de gestión establecida en los correspondientes Planes Provinciales.
 Cada punto limpio incluye:
- Contenedores para residuos voluminosos (escombros, maderas, electrodomésticos).
- Contenedores para residuos de poco volumen (papel, pilas, aceites…)
- Edificio de control de instalaciones.
- Viales, plataformas y vallado de parcela.
 
 Un punto limpio es un recinto cerrado y vigilado que permite a los ciudadanos, depositar aquellos desperdicios domésticos, que por su naturaleza deterioran el medio ambiente cuando son eliminados con los residuos orgánicos que se generan en las casas. También se pueden depositar residuos que por su tamaño, o por cantidad no son recogidos por los servicios de recogida de basura con el objetivo de servir a los ciudadanos como centros de aportación voluntaria para la recogida selectiva de residuos.