Cementerio de San Nicolás

Esta necrópolis se encontraba extramuros, al sudoeste del recinto amurallado, entre la iglesia de San Nicolás y el río Adaja, en un paraje llamado Vado de San Mateo. Descubierta en 1999 en las intervenciones arqueológicas realizadas por la urbanización de la zona, desde el primer momento quedó de manifiesto su carácter de cementerio islámico (maqbara), debido al tipo de enterramiento (cuerpos colocados en posición decúbito lateral derecho, en fosas estrechas orientadas este-oeste o noreste-sudoeste). Y conforme al ritual islámico, los cuerpos se enterraron sin ataúd ni ajuar, siendo excepcionales los elementos de adorno aparecidos.

Se descubrieron más de 3000 sepulturas, lo que convierte a esta maqbara no sólo en la más importante en tamaño del ámbito mudéjar, sino incluso del propiamente andalusí. Su cronología abarca del siglo XIII al XV.

A su importancia cuantitativa y cualitativa, se debe sumar la existencia de un voluminoso conjunto de estelas funerarias, que señalizaban las sepulturas al exterior. Aunque varias aparecieron in situ, la mayoría de las que conocemos están descontextualizadas, ya que se han localizado reutilizadas como elementos constructivos en tapias y muros de diferentes edificios o colocadas a modo de bolardos  por las calles de la ciudad.

Si bien la mayoría de estas piezas son anepígrafas, las pocas conservadas con inscripción, en árabe, confirman su carácter islámico, pues utilizan las fórmulas usuales del Islam, con recursos a citas coránicas.

Además de esta maqbara de San Nicolás (actualmente no conservada; el lugar está urbanizado y no hay ninguna referencia a la necrópolis) , existen sólidos indicios documentales de la existencia de otros lugares de enterramiento de musulmanes en Ávila: uno junto al monasterio cisterciense de Santa Ana y otro junto al premostratense del Sancti Spiritus. De ellos no se ha documentado nada arqueológicamente hasta el momento, aunque algunas de las estelas conocidas podrían venir de allí.

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